Durante
el mes de febrero de 2002 fueron invitados
por la Unión de Rugby de Buenos Aires
los Sres. Pierre Villepreux, Director Técnico
Nacional de la Federación Francesa
de Rugby y el Sr. Fabrice Brochard, Entrenador
Nacional de la F.F.R. Durante dicho período
dictaron cinco clínicas (teórico/prácticas)
dirigidas a entrenadores de Divisiones Superiores,
lo que sigue a continuación es la trascripción
de la charla dada el 20 de febrero en el Club
Atlético San Isidro.
Este concepto es difícil de manejar
ya que el mismo se renueva cada tres o cuatro
años y con el tiempo, lo va a ser
cada vez más rápidamente,
por eso nuestro desafío es cómo
hacer para tener mejores jugadores que estén
en grado de adaptarse a dichos cambios.
Vamos, en esta charla, a contarles en forma
sintética cómo hacemos para
desarrollar a nuestros jugadores desde niveles
de principiantes hasta el más alto
nivel y vamos a hacer un entrenamiento adaptado
a las prioridades que nosotros consideramos
que son importantes hoy en día.
El rugby es un juego de ataque pero también
es un juego de defensa y la tendencia hoy
en día es decir: hoy trabajamos el
ataque o trabajamos la defensa, pero trabajamos
las dos al mismo tiempo.
Yo defino al Rugby como un juego de ataque
y de defensa y cuando alguien tiene la pelota
actúa sobre la defensa y la defensa
reacciona respecto al atacante. Si cortamos
el juego en dos durante los entrenamientos,
vamos a cortar la complejidad del mismo
y sólo tendremos el partido del fin
semana para encontrar nuevamente esa complejidad.
Por eso nosotros en Francia hablamos del
juego en toda su totalidad; para esto tenemos
que hablar de las reglas que comprenden
a los jugadores, al conjunto de ellos y
a sus comportamientos que son diferentes
a medida que las reglas evolucionan. Como
ejemplo tenemos la regla del line out que
ha cambiado completamente el juego del rugby.
El rugby actual es completamente diferente
al que hemos jugado nosotros y ya los jugadores
no se rigen por los números que llevan
en la espalda sino por el espacio que ocupan.
Hoy en día las reglas han traído
mucho movimiento y desplazamiento de los
jugadores y de la pelota y por consecuencia
mayores detenciones temporarias del juego,
tackles y reagrupamientos.
El rugby actual, podemos decir, que es
movimientos más puntos de fijación;
esto nos demuestra que las fases de movimiento
son cada vez más importantes, y que
ocupan la mayor parte del tiempo de juego.
Este movimiento puede ser tanto con las
manos como con el pie y nuestros entrenamientos
deben estar orientados a ocupar el mayor
tiempo en este aspecto del juego y NO como
se hace tanto en Francia como aquí
donde se da más importancia el aspecto
estático del juego.
Por eso en Francia cuando
hablamos de la progresión de la enseñanza
del jugador debutante al jugador de alto
nivel se va de las fases dinámicas
hacia las fases estáticas.
Con esto no queremos decir que las formaciones
fijas no sean importantes, pero si consideramos
imprescindible que lo primero tienen que
saber los jugadores es accionar y reaccionar
dentro del juego manejando todos los principios
del mismo que son, como todos sabemos: 1º
AVANZAR, sin el cual no podríamos
realizar nada y 2º de UTILIDAD, que
es cuando el jugador sabe qué hacer
cuando esta sobre la pelota, en la proximidad
de la misma y lejos de ella logrando la
mayor eficacia posible.
Las fases estáticas van a ser prioritarias
a partir que el arbitro marque una infracción
y hasta el lanzamiento del juego, que nos
va a llevar nuevamente a la situación
dinámica. No hay una separación,
sino que hay un lazo permanente. En definitiva
quiero dejar en claro que nuestra progresión
de enseñanza siempre va de los movimientos
dinámicos para, a partir del desarrollo
de los mismos, llegar a la enseñanza
de las fases estáticas del juego.
Actualmente el juego de movimiento no se
caracteriza solamente por el juego de pases
o juego con el pie sino también por
muchas detenciones a partir de los tackles
y por confrontaciones individuales (1 vs.1)
que son muy numerosos y generan obligaciones
en los jugadores. Es decir, en cada tackle
se presentan dos opciones; una la conservación
de la pelota y la otra es la pérdida.
En el caso de que la conserve el jugador
se le presentarán distintas opciones
de juego, si la pelota es liberada rápidamente
el jugador podrá decidir en que sentido
juega la pelota o si quiere avanzar en el
eje profundo y los encadenamientos del juego
se darán en forma dinámica.
En cambio si la pelota es liberada lentamente
la defensa tiene todo el tiempo para re-ubicarse
y en definitiva es la misma situación
que encontramos cuando iniciamos el juego
de una formación fija.
En el rugby moderno se busca liberar la
pelota rápidamente a condición
de que estemos organizados colectivamente
para poder explotar esa situación.
Hoy en día el número de tackles
es muy grande y a mi entender no estamos
usando las reglas correctamente o por lo
menos con el espíritu en que están
concebidas, que es la de evitar los tackles
y de jugar las pelotas por el suelo. Los
jugadores de alto nivel apenas toman la
pelota van contra el primer marcador que
encuentran enfrente.
En Francia les pedimos a nuestros jugadores
más jóvenes que están
yendo hacia el primer nivel, que no vayan
contra los muros sino que utilicen las puertas;
otra figura interesante para graficar esto
es que no vayan a chocar contra el tronco
de un arbol ya que es más fácil
pasar a través de las ramas.
El juego es de una gran confrontación,
pero las defensas se ubican a todo lo ancho
de la cancha y no dejan mucho espacio para
penetrarlas, pero tenemos que considerar
que esto se produce por que los atacantes
se organizan mal para penetrarlas; nuestro
objetivo será desorganizarlas y una
vez echo esto debemos penetrarlas y tratar
de mantener esta desorganización
a medida que vamos atacando. Pero para esto
debemos jugar de pie y no ir al suelo, donde
el jugador debe comprender que si va al
suelo está penalizando tanto a su
equipo como a él mismo.
Los debemos convencer que deben tratar por
todos los medios de jugar mediante pases
por arriba y para que se den cuenta de esto
se deben entrenar con muchos ejercicios
con oposición.
El entrenamiento con oposición no
debe ser mediante una oposición estúpida.
Le pediremos a los jugadores que trabajen
inteligentemente respetando las consignas
planteadas, de manera tal que el trabajo
realizado sirva para desarrollar el juego
de ellos mismos. Si entrenamos sin oposición,
tenemos que tener en claro que debe ser
para desarrollar la táctica individual
en función de la organización
colectiva. Pero si queremos trabajar la
inteligencia en el juego, sólo podremos
hacerlo mediante la oposición; esto
es tan importante para el jugador debutante
como para el jugador de alto nivel.
Durante mi trabajo junto a Jean Claude
Skrela en el Seleccionado de Francia encontré
algunas dificultades para incorporar este
tipo de consignas, porque cuando uno propone
un trabajo de oposición genera incertidumbre
en el jugador, ya que no le damos la solución
a los problemas planteados. Los jugadores
prefieren que les brinden las soluciones
de los problemas, ya que si pierden el que
se equivocó es el entrenador, que
dio la solución equivocada y no él.
Nosotros queremos que el jugador busque
la solución porque de esta manera
va a tomar la iniciativa y es eso lo que
pretendemos de un jugador de alto nivel,
que tenga personalidad para tomar sus propias
decisiones. Esta oposición no siempre
es 15 contra 15, puede ser también
8 contra 8 ó 2 contra 2; lo importante
es como pasamos de una a otra basándonos
en nuestras necesidades.
Muchos entrenadores me plantean la dificultad
de cómo hacer esto y creo que es
muy simple, si tomamos como última
acción de un movimiento de juego
un 2 contra 1 ahí ya tenemos un juego
de oposición, si consideramos al
apoyo defensivo más cercano podemos
trasformarla en un 2 contra 2 y tomando
a los apoyos más cercanos que participan
se transforma en un 4 contra 4 y así
podemos llegar tranquilamente al 15 contra
15 habiendo pasado por todas las posibilidades
de juego.
La comprensión del conjunto es lo
que permite la comprensión de las
particularidades y viceversa. Dada la importancia
que hoy en día le damos a las fases
dinámicas va a ser fundamental que
los jugadores sean polivalentes, es decir
que el pilar pueda hacer un pase como un
tres cuarto y que un tres cuartos sea en
logrado en formar un maul o un ruck.
Todo esto en definitiva va a ser el resultante
de buenos entrenamientos con oposición.
Días de Rugby