Habían viajado a los Estados unidos invitados por un club de rugby local, pero los agentes de migraciones supusieron que iban a quedarse a trabajar como ilegales. Los arrestaron y los enviaron de regreso. En resumen, un terrible momento para los rugbiers mendocinos.
Viajaron a Estados Unidos para jugar al rugby. Pero no pudieron hacerlo. Apenas pusieron un pie en el aeropuerto, los jóvenes mendocinos fueron detenidos por agentes de migraciones y enviados de regreso a la Argentina.
El caso ocurrió el sábado pasado, cuando Federido Orcajada y Sebastián Serer -dos mendocinos de 21 años- llegaron a Atlanta, Estados Unidos. Habían viajado para jugar al rugby, invitados por un equipo de la ciudad de Springfield.
Pero las cosas no salieron como las habían planeado. Los agentes de migraciones creyeron que los jóvenes tenían una intención oculta: quedarse a trabajar como ilegales. Entonces, losdetuvieron y los trasladaron a un calabozo. Hasta que, horas después, los enviaron de regreso a la Argentina.
“Nos trataron muy mal, como si fuéramos delincuentes”, dijo esta mañana Sebastián. El joven contó que llegaron a las 6.45 del sábado al aeropuerto de Atlanta y que quedaron detenidos cuando realizaban los trámites de migraciones. “Compartimos la celda con un narcotraficante colombiano y un ex convicto de Afganistán", relató. Y agregó: “No veíamos la hora de volver”.
También Federico contó cómo vivió esas horas de angustia. Según comentó, apenas bajaron del avión los agentes los trataron de “muy mala manera", ya que no les creían que habían viajado para jugar al rugby.
"Nos separaron para que no habláramos entre nosotros. Nos hacían preguntas y nos hacían entrar en contradicciones", relató el joven.
Los chicos juegan al rugby en el club mendocino “Los Tordos”, en Guaymallén, desde los 12 años. Y estudian la carrera de Administración de Empresas en la universidad.
No habían viajado de modo improvisado. Llevaban una carta de invitación del “Springfield Rugby Club”, pasajes de ida y vuelta, registró de conducir internacional, dólares y ropa deportiva. Aunque nada de esto sirvió para convencer a los oficiales, que esa misma noche los embarcaron en un vuelo nocturno de regreso a Argentina.
"Antes nos hicieron firmar una declaración jurada en donde decíamos que nos habían tratado bien", expresaron los dos jugadores. Mientras que sus documentos "fueron entregados por Migraciones al capitán de vuelo" y recién los pudieron recuperar en Santiago de Chile.
Bibiana Orcajada y José Luis Serer, padres de los jóvenes, se mostraron “indignados” por lo ocurrido. Y no descartaron realizar "gestiones legales a nivel nacional" para “prevenir a quienes van a viajar al exterior".