No hay cambios. La fecha no se juega”, contestó un dirigente de la URT tras la reunión realizada anoche. “En el boletín se informará la reglamentación a seguir y las sanciones que les cabrán a los clubes que no cumplan”, añadió.
La afirmación tiró por tierra las esperanzas de los jugadores de todas las divisiones de poder entrar a la cancha el fin de semana. Incluso aguardaron la noticia en las distintas prácticas. Pero no. Deberán esperar una semana más para poder sacarse el gusto.
La historia comenzó el martes con la decisión del Consejo de la URT de suspender toda la programación prevista para el fin de semana por falta de árbitros. “Se veía venir”, comentó el titular de Tucumán Rugby, Nicolás Avellaneda. “Los clubes debemos tomar conciencia y trabajar en este aspecto”, coincidieron varios dirigentes de los distintas entidades.
Para los árbitros el tema no es novedad y ya se viene anticipando desde hace muchos años. Es más, en los últimos tiempos bajó el número de aspirantes y sólo unos pocos terminan el curso.
Muchos se quejan de que hay un viejo reglamento que nunca se hizo cumplir. Este dice que cada club debe aportar un árbitro por división que presenta más tres aspirantes. La media de los clubes es de siete divisiones. O sea, debería presentar siete árbitros y tres aspirantes. Pero son pocos los que la cumplen. ¿Qué pasa con el resto? Nada.
Siempre aparecen llamados de atención en los boletines de la URT pero nunca una medida. Hace unos dos años se dejó de programar árbitros a los clubes que no hacían el correspondiente aporte cuando estos jugaban de visitantes. Es decir, el juez lo debía designar el club local. Claro que esto, muchas veces, trajo problemas.
“El tema es grave, porque este fin de semana debían dirigir ocho árbitros afuera, el próximo tres y al siguiente se eleva a diez el número de los que deben viajar”, comentó José Matalías, el presidente de la Comisión de Arbitros.
El tema es que no hay árbitros suficientes y en Tucumán no hay asignado ningún arancel por dirigir partidos, como en otros lados. A lo sumo se les abona una especie de viático que representa el pasaje (a Concepción, a Salta o a Santiago del Estero), más gastos de comidas. Ahora están tratando de que también se les reconozca la movilidad interna cuando viajan. Esto es, taxi desde la terminal hasta la cancha. Algo lógico, ya que en Salta, por ejemplo, las distancias son grandes.
¿Por qué faltan árbitros? Es la pregunta de siempre. Las respuestas son muchas: desidia de los clubes, falta de colaboración, falta de motivación por los constantes insultos que muchos reciben, en especial en las divisiones juveniles, entre otras cosas.
“No creo que sea por los insultos”, resaltó Héctor Navajas. “El arbitraje es una vocación y cuando uno empieza es muy difícil dejarlo”, añadió.
No piensan lo mismo, por ejemplo, los hermanos Daneri, dos históricos en el referato tucumano. “El mayor problema no es sólo que son criticados por el público, lo más grave es que también son cuestionados por sus pares que se ubican en las tribunas”, señaló Roque Daneri. “Dejamos de dirigir por las constantes agresiones e insultos que sufrimos en las canchas”, confesaron varios de los jueces que colgaron el silbato en los últimos años.
Otro tema del que nadie, o pocos, hablan es que en los últimos tiempos los árbitros también sufrieron bajas por las internas de la conducción.
Los factores a tener en cuenta son muchos. La palabra la tienen los dirigentes. Que nunca más se pare un campeonato.
Entre tiempo
Decisión. No es la primera vez que se para el campeonato por falta de árbitros. Ya ocurrió en otras oportunidades y la lección no se aprendió. Además, en otras ocasiones el certamen se suspendió pero a causa de las agresiones e insultos que recibían los jueces en los distintos partidos.
Viáticos. En Tucumán se abona una especie de viático para solventar los gastos que ocasionan los viajes. Pero en la mayoría de las provincias se abona un arancel por partido dirigido. En Buenos Aires este se implementó en 1998 con tres categorías (A, B y C), de acuerdo a la jerarquía de los árbitros, a las categorías que dirigen y a las distancias que deben viajar para dirigir. En Córdoba también se aranceló desde hace ocho años, lo mismo en Rosario, en Mar del Plata y en Mendoza. “Hasta en Salta y en Santiago del Estero se paga”, confió un árbitro tucumano. En el caso del hockey se le abona a cada réferi desde la década del 80. Hoy se le paga $ 30 por partido.
Enojo. “No paramos los árbitros, quiero aclararlo. Porque muchos me hablaron enojados con nosotros y esta decisión fue del Consejo. Los árbitros no paramos”, aclaró José Matalías, titular de la Comisión de Arbitros.
Aportes. De acuerdo con lo publicado en el boletín de la URT, Los Tarcos, Lawn Tennis, Lince, Cardenales, Universitario y Natación son los clubes que más aportan árbitros. De los de primera, los menos son Bajo Hondo, Huirapuca, Jockey Club y Tucumán Rugby. “El mayor desfasaje también viene de Salta y Santiago del Estero. Los salteños tienen 10 equipos y aportan sólo dos árbitros. Los santiagueños tienen cuatro y no aportan ni uno solo”, comentó Matalías. “Si todos cumplieran deberíamos tener cerca de 70 árbitros y 50 aspirantes”, añadió.
Aspirantes. Cada club debe aportar tres aspirantes para el curso de árbitros. En Tucumán hay 17 clubes anotados, o sea que debería haber más de 50 aspirantes. A la primera clase asistieron 12, a la segunda 16. “Lo que pasa que muchos clubes anotan árbitros o aspirantes en forma mentirosa, que no van a los cursos o que no pueden dirigir”, aclaró Matalías.