Los All Blacks, que hace dos semanas ganaron a Irlanda por 21 a 11, habían derrotado hace una semana a los ingleses por 37 a 20 en Auckland pero esta vez jugaron su partido más convincente de todo el mes de junio.
El único toque negativo fue la lesión de dos jugadores importantes, Ali Williams y el capitán Richie McCaw, ambos por lesiones "bastante serias", según el seleccionador, Graham Henry.
Henry había decido titularizar a tres novatos: Rudi Wulf, Richard Kahui y Adam Thomson. Kahui no tardó en agradecérselo marcando un try antes del cuarto de hora (13, 8-0).
Luego Dan Carter se hizo cargo del juego, después de anotar dos penalizaciones y una conversión, y dio el 20-0 a su equipo a la media hora de juego.
Castigados por otra penalización de Carter, los ingleses no se desarmaron y por fin Danny Care logró el try, que convirtió Barkley (23-7), antes de que Carter hiciera el 30-7 en el minuto 51.
Diez minutos después, los locales anotaban otro try (61, 37-7), antes de que Varndell acortara distancias (37-12). El marcador podía haberse quedado así hasta el final pero los Blacks aprovecharon un último fallo inglés para hacer el 44-12.