El encuentro comenzó con Argentina mejor, tratando de tomar la iniciativa, pero fueron los ingleses los que golpearon primero gracias a un penal de su apertura, Toby Flood.
Todavía no llegábamos a los quince minutos y ya había dos amonestados, ambos argentinos, Marcos Lobato en primera instancia y luego Manuel Carizza. La cosa no pintaba bien para los Pumitas.
Promediaba la etapa inicial y el juego era una constante lucha de forwards, lo que hacía muy trabadas las acciones. El partido cada vez se ponía más áspero, digno de un enfrentamiento de tal magnitud.
Terminaban los primeros cuarenta y Argentina le metía con muchas ganas, y aunque no podía penetrar la fuerte defensa de los británicos, la actitud de estas “fieras” contagiaba a todos.
Si los Pumas tienen alguna fortaleza dentro del terreno, esa es el scrum, y a cinco metros del ingoal rival es letal. Virtud de ello, luego de una salida rápida de esta formación, llegó el primer try de la tarde gracias a Horacio Agulla que apoyó y puso al frente al combinado nacional. Sonaba la chicharra y Argentina se iba al descanso 7 a 3 arriba.
En el complemento el equipo de los “Eduardos”, comenzó con las mismas ganas que en el primer tiempo. Sin embargo las contingencias climáticas eran un factor determinante a la hora de jugar la ovalada con las manos, por eso mismo Santiago Bottini de penal sumó tres más para la Argentina. Pero ahí nomás, nuevamente Flood con el pie, descontó para los de la rosa.
Si bien Los Pumitas dominaban las acciones generales del juego, no podían desplegar todo su potencial en el terreno, pero era la actitud y por sobre todo la garra Puma, lo que le permitía a los argentinos estar arriba en el marcador.
Cuando se jugaba la mitad del complemento, un buen line jugado por Matías Cortese, derivó en las manos del recién ingresado Juan Gómez que logró marcar un nuevo try. Argentina estiraba la diferencia y se ponía 17 a 11.
Debido al mal estado del terreno, producto de la llovizna que caía de forma incesante, el traslado se hacia muy difícil, justamente por eso, cada posibilidad de sumar en los palos debía ser aprovechada, y fue así como nuevamente el apertura argentino Santiago Bottini de penal a los treinta, sellaba el definitivo 20 a 6 para el equipo nacional.
De esta manera, Los Pumitas se quedan con una victoria muy festejada, seguramente la más festejada hasta ahora, ya que después del mal trago por la suspensión de Agustín Creevy, una victoria ante un rival de semejante envergadura y al que no se le había ganado nunca en esta categoría, tiene un gustito muy especial.
Jim Mallinder (entrenador Inglaterra)
"Estamos muy decepcionados con nuestra actuación de hoy. Le doy todo el crédito a Argentina, que jugó mejor que nosotros. Ahora tenemos que pensar en Escocia o Gales, porque queremos terminar el torneo de la mejor manera y jugando un muy buen rugby".
Eduardo Fernandez Gill (entrenador argentino)
“La verdad que destacó la gran fortaleza mental que tiene este grupo, estos chicos vienen luchando contra adversidades muy fuertes desde que estamos acá, la adversidad más fuerte la demostramos con Gales sabiendo que el equipo no estaba clasificado, salio y cumplió con lo que tenia que cumplir.”
“La suspensión de Agustín Creevy nos cayó como un piano de un quinto piso, pero después de eso el grupo se hizo más fuerte y hoy lo demostró en la cancha”
“Yo creo que jugar contra Inglaterra, por lo que significa jugar con el último campeón mundial de mayores, tiene mucha importancia porque a Inglaterra no se le gana todos los días.”
“El fuerte de ellos es el moul y cuando intentaron un par de veces con el moul y fueron para atrás es lo mismo, que si nosotros fuéramos para atrás con el scrum, yo creo que eso los destruyó”
“yo creo que los referís se preocupan más por castigar a Argentina que por castigar el juego, no cobró todo lo que tenía que cobrar y nos castigó muy tempranamente con dos amarillas antes de los 15 minutos”
Francisco Albaracín (capitán de Argentina)
"Quizás fue el peor partido que jugamos, pero estos partidos se juegan así, con ganas. La cancha no nos favorecía demasiado, estaba la pelota muy mojada pero había que mejorar la clasificación del Mundial anterior, pero Argentina siempre le gusta ganarle a Inglaterra. Ellos entraron muy poco en nuestras 25 yardas y nosotros manejamos bien las pelotas que tuvimos".
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