Irlanda dominaba en las formaciones, es más, después de un scrum en cinco yardas rivales, los europeos consiguieron apoyar el primer try de la tarde, cortesía de Stuart Philpott . Pero más rápido que inmediatamente, Samoa logró empatar en una jugada similar por medio de Anthony Tuimaga. 

Si bien la historia de uno y otro, daba como candidato en la previa a los británicos, después de unos minutos de dominio verde, los oceánicos lograron nivelar las acciones.

Pese a la paridad en el juego, Gareth Steenson para Irlanda por medio de un penal, consiguió sacar una pequeña ventaja en el score, que no evidenciaba en el terreno.

Aunque Samoa Permanentemente buscaba llevar la ovalada a terreno rival, estos se mostraban carentes de ideas a la hora de penetrar en el ingoal verde.

Sin embargo dicen los que saben que las oportunidades que no se aprovechan se terminan sufriendo en contra. Irlanda se aprovechó de eso y por el sector izquierdo de su ataque, el fullback Marck Kettyle, apoyó y puso el 13 a 5 para los europeos con el que finalizo la primera etapa.

El complemento comenzó ya con los irlandeses dominando totalmente las acciones, primero Gareth Steenson de penal y luego Stuart Philpott con un nuevo try, pusieron el 21 a 5. Corrían cinco de la segunda parte y ya había olor a partido definido.

Lamentablemente, el encuentro poco a poco se fue poniendo violento y áspero, los samoanos que tienen un historial de rugby bastante duro, reflejaban esa mala fama en el terreno. Pero el único que sacaba réditos de la aspereza del juego eran los británicos. otra ves el apertura con un nuevo penal, y en una de las jugadas más lindas del partido, Sthepen Ferris con un try, estiraron la ventaja a treinta y uno para los últimos subcampeones.

No obstante y contrariamente a lo ocurrido en los cuarenta primeros, cuando promediaba la etapa final, los oceánicos tuvieron dos oportunidades, y después de dos muy buenas jugadas con un muy buen juego de manos, los morenos descontaron y sellaron el definitivo 34 a 17.