Con la frente en alto, con mucho corazón cayó derrotado el Campeón de nuestra región, el club Los Tordos, en una final que tuvo mucha adrenalina, mucho vértigo y una gran propuesta de juego por parte del conjunto visitante que, pese al gran esfuerzo y desgaste, no hizo los méritos suficientes para vulnerar a la férrea defensa tucumana.

Durante el primer tiempo se pudo notar una paridad en las acciones. El dueño de casa marcó la apertura del score por intermedio de un penal de su efectivo pateador, el fullback Granata pero Tordos no se quedó en lamentos y rápidamente encontró respuesta con un exquisito drop del apertura Lizarraga.

Posteriormente, llegaría una jugada con mayor elaboración por parte de los "Purpurados" que desembocó un try con gran despliegue. Hubo fases, continuidad, apoyo y el compromiso de todo el equipo para participar e ir para adelante en busca del in-goal adversario.

Sin embargo, la alegría de los tucumanos nuevamente fue apaciguada en pocos minutos puesto que los "Pájaros" volvieron a encontrar respuestas gracias a la potencia de Pedró Lértora que apoyó su try pegado al touch.

Promediado la primera parte, "Nales" logró un mayor protagonismo y a eso le sumó la "ventaja" que obtuvo al jugar con un hombre más producto de la amarilla que vio Nicolás Chávez.

Con ese panorama, el "Azulgrana" tuvo que hacerse fuerte defensa y comenzar a tacklear para empezar a tener algo de posesión cosa que con el correr de los minutos fue logrando pero que no le alcanzó para obtener pelotas de calidad que comprometieran a su rival y que se reflejaran en el tanteador.

Ya en el complemento, Los Tordos salió decidido a dar vuelta la historia y rápidamente metió a Cardenales en su campo pero, fue desde ahí donde gestaron el segundo try, luego de un line-out defensivo y una distracción de los quince del Carril Urquiza que permitieron el avance de un maul que ganó muchos metros y derivó en una buena conexión entre forwards-backs y el try del wing Mauro Gelsi, cachetazo impensado.

Luego de eso, fue una exhibición de rugby de Los Tordos que mostró un despliegue impresionante en ofensiva, buscando por todos los sectores del campo de juego, la artillería pesada que tenían en el banco de suplentes entró entonada y empezó a marcar el ritmo de las acciones. (Moretta, Bustos, Castillo, Conil).

La garra y el compromiso de cada uno de los jugadores azulgranas estuvieron impecables. Propusieron y dieron todo lo que tenían. Quizás en el debe quedó el hecho de tener mayor efectividad en el envío a los postes, mejor uso de los kicks a cargar, cierta paciencia para respirar, pensar, analizar y ver cuáles eran las opciones más acertadas a la hora de jugar luego de las penalizaciones.

Hubo, prácticamente, diez minutos donde Los Tordos tuvo la "ventaja" de jugar con dos hombres más productos de sendas amarillas aplicadas a los tucumanos y, sin embargo, no se le pudo sacar provecho a esto.

La diferencia durante gran parte del segundo tiempo fue de apenas siete puntos y los jugadores "Azulgranas" lo sabían y por eso arrinconaron a su rival, lo metieron a defender en su campo, en los últimos metros previo al in-goal pero... algo faltó para lograr la estocada final, esa que permitiera a toda la hinchada de Los Tordos (viajaron más de 300 simpatizantes) ilusionarse con el campeonato.

Digna derrota de Los Tordos pero sufrida y sentida por todo Mendoza puesto que nos quedamos con las ganas de lograr la plaza en el máximo torneo que tiene el rugby nacional.

Estuvimos muy cerca, a la altura de las circunstancias pero habrá que seguir trabajando en pos del crecimiento del rugby de nuestra región, de nuestra provincia.