Todo el festejo Sanjuanino al finalizar el match

Siete días atrás, en el partido de ida jugado en Santa Fe, la victoria había favorecido al local por 25 a 18, por lo que habían ocho puntos en juego, para un lado o para el otro, ocho puntos que marcarían el destino de uno y otro.

Y así fue la historia nomás, fueron esos ocho puntos de diferencia en el marcador los que necesitó San Juan para volver al rugby grande de la Argentina, fue 14 a 6, ocho puntos de oro y nada más que hablar, el partido fue bastante pobre, deslucido, con mil errores, ¿importa eso?, lo importante era lograr o mantener el Ascenso y ese objetivo uno de los dos lo logró.

El escenario elegido, las instalaciones del San Juan RC, albergaron mucho público que se acercó para ver el destino de los Viñateros, Ascenso o descenso, 80 minutos para definir la historia y el futuro de ambas escuadras, estuvo para cualquiera, fue una final y se definió como tal, como una pelicula con suspenso hasta el instante final.

Así fue entonces como comenzó a girar la guinda en Santa Lucía, los primeros minutos fueron desordenados, aspecto predominante durante casi todo el encuentro, se jugaba con el corazón y se cuidaba cada pelota como si fuera vital perderla y por supuesto que lo era.

El primer tiempo finalizó 3 a 0 producto de un penal convertido por Hugo Carrizo, antes de los 10' el apertura local ponía a su equipo a cinco puntos de la gloria, claro que pudo haber más puntos pero los nervios de cada equipo jugó un papel crucial a la hora de las definiciones.

En la segunda mitad el partido se fue poniendo intenso, mucho desgaste en las móviles fueron quitando resto a los delanteros de los dos equipos, que comenzaban a utilizar cada vez más a sus backs con ataques profundos que generaban mucho peligro, pero que carecían de definición.

Promediando esta parte llegó el primer try del encuentro, San Juan fue trasladando la guinda por el ancho del campo con los tres cuartos, pero fue un tercera línea quién apareció entre medio, Maxi Santander, quién recibió, esquivó y apoyó. 8 a 0.

Santa Fe se ordenó y comenzó de dejar de patear todo lo que recibía en su campo, atacó desde el fondo con un Leandro Moleón intratable que hizo estragos cada vez que avanzó desde atrás.

Sin embargo los tries no llegaban, Pedro Bennet, apertura del equipo del Litoral, había errado un par de penales, hasta que por fin cortó esa racha y sumó sus primeros tres puntos, poco duró esa diferencia ya que otra vez, Hugo Carrizo, de buen partido, acertó otro penal volviendo a poner las cosas a 8 de distancia.

Los últimos diez minutos fueron para el infarto, Santa Fe se fue a la carga a todo o nada y no se movió practicamente del campo rival, atacó, jugó, tiró drops, pero nada le dio resultado, hasta estuvo dos veces a punto de try mordiendo el ingoal, pero la defensa "Azul" dejó su humanidad protegiendo ese, su ingoal.

A dos minutos del final, Pedro Bennet silenció a las 1500 personas presentes que silbaron como nunca el intento a los palos que el apertura acertó, se iba el match y Santa Fe se lo llevaba, perdía sí, pero por menos de ocho.

Tiempo cumplido y penal para San Juan, su pateador afuera amonestado, el capitán tomó la guinda pidió palos en la mitad de la cancha y tomó carrera, a varios, porque no a la gran mayoría, se les pasó la misma película que en el 2009 jugando contra Mendoza por el Argentino, con aquella definición en favor de los mendocinos con el envío que se fue ancho.

Alejandro Gómez, sí, el gran Capitán que este año estrenó la cinta en su brazo, llenó de gritos atragantados a todos los presentes que reventaron al ver pasar la guinda por encima del travesaño y entre los dos postes.

San Juan ganó por ocho puntos, eso le pidieron, no?