El plantel se sacó la foto oficial que se usará durante el Mundial. Fue una tarde distendida en Belgrano Athletic, donde hasta hubo un picadito de fútbol con pierna fuerte y alguna que otra cargada. Argentina viajará el lunes próximo a Gales a la espera del gran debut ante Francia, el 7 de septiembre.
Ya se cuentan los días para el comienzo del Mundial. Hoy fue el día de rutina de la foto oficial, y los jugadores aprovecharon para divertirse un poco. Había una hora programada, con puntualidad inglesa: a las tres de la tarde. Ni uno más, ni uno menos.
Algunos fueron llegando a las corridas, como Federico Serra y Martín Schusterman. Otros, demorados por la prensa, tuvieron que cambiarse a las apuradas: Ignacio Corleto y Patricio Albacete. Y dos del staff llegaron tarde al Belgrano Athletic, como Les Cusworth y Mario Larrain.
Los puntuales del plantel no dejaron pasar la oportunidad y se armaron un partidito de fútbol. "Los viejos de un lado, los chicos del otro", gritó Juan Fernández Lobbe y se armó. Roncero, Nacho Fernández Lobbe y Manuel Contepomi era un equipo, y el otro lo formaron Corcho, Agulla, Serra y Leguizamón. Mientras ellos se divertían, los demás aprovecharon para hablar un poco entre ellos, mientras aguardaban para posar frente a las cámaras.
Una vez que los treinta estaban listos, encararon para la mitad de la cancha del club de Virrey del Pino donde estaban ubicadas las gradas. Los chicos que habían ido a presenciar ese momento comenzaron a cantar y alentarlos, como si un test match estuviese por comenzar. Las bromas fueron moneda corriente.
Los hermanos Fernández Lobbe a la cabeza. Marcelo Loffreda les explicaba a todos cómo se tenían que poner para la foto. Y sí, él ya tiene experiencia en estos menesteres. Por cinco minutos, quedaron expuestos al gatillar de los fotógrafos. Como es habitual, cerraron con la "divertida", a pedido del Tano.
Después de todo este trámite, el plantel se fue a cambiar rápido y a entrenarse. Ya había pasado el momento de distensión, el que tanto hace falta para después rendir adentro de la cancha.
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