Los Wallabies con la medalla de Bronce
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Desde el inicio, ambos equipos mostraron su intención de jugar un rugby abierto, entretenido, y con el firme objetivo de culminar en el podio del certamen que se disputa en Nueva Zelanda. No obstante, aparecieron algunas imprecisiones y dos lesiones que opacaron el desarrollo para los Wallabies.
Tras un comienzo errático, Australia se soltó y logró posicionarse cerca del ingoal galés. Insistió con los forwards y definió con los tres cuartos a partir de una combinación entre Quade Cooper y Berrick Barnes, quien explotó un espacio para culminar la maniobra debajo de los palos.
Con la conversión de James O'Connor el encuentro quedó 7-0, pero rápidamente Gales buscó la recuperación. Sin la presencia de su capitán Sam Warburton, pero con Gethin Jenkins jugando su partido Nº15 por RWC y estableciendo un récord para su país, el Dragón logró capitalizar su primera oportunidad en la etapa inicial a través del pie de James Hook, que logró descontar con un penal.
Sin abusar del pie e intentando mover la pelota por todo el ancho de la cancha, los dos buscaron ofrecer un partido emocionante a la multitud presente en el Eden Park, aunque el sabor amargo afectó a los Wallabies a partir de las lesiones de Quade Cooper y Kurtley Beale, que se vieron obligados a dejar el campo.
Antes del cierre del primer tiempo, tanto O'Connor como Halfpenny dejaron en el camino un penal para cada lado, por lo que el resultado parcial de 7-3, que no se modificó, mantuvo la atención para la etapa complementaria.
De pie para aplaudir a Gales
En la reanudación, Hook dejó pasar una chance factible de ponerse a un punto al fallar un penal frente a los postes. Sin embargo, Gales no cedió en su lucha y, tras recuperar una pelota en un ruck, generó una maniobra para que -rastrón mediante- Shane Williams dijera presente en el ingoal y pusiera a su equipo al frente por 8-7 con nueve minutos jugados.
A partir de allí, Australia tomó el dominio con paciencia y oficio. Sin lucirse, provocó infracciones en el conjunto dirigido por Warren Gatland y volvió a liderar el resultado por dos penales de O'Connor. Al wing, se sumó el aporte de Berrick Barnes –elegido Jugador del partido-, que con un drop estiró las diferencias a 16-8.
Con diez minutos por jugar, Stephen Jones acertó un penal para Gales y le imprimió dramatismo al desenlace, pero Australia volvió al ataque y encontró su premio a través del octavo Ben McCalman, que apoyó para definir un choque que ya parecía tener dueño.
Antes del cierre, Gales persistió hasta lograr la superioridad numérica por afuera y el fullback Leigh Halfpenny coronó con su try la última maniobra, por lo que tras las conversión de Jones, el éxito de Australia fue por 21-18.
Así, los Wallabies se despidieron de la RWC 2011 en el podio, mientras que Gales cumplió con una reconocida actuación y se retiró largamente ovacionado del Eden Park.
Un día especial para Sharpe
Nathan Sharpe, segunda línea de Australia, fue titular y se convirtió en el 21º jugador en alcanzar los 100 caps, y en el 20º en hacerlo jugando solo para su país (Martyn Williams tiene 99 para Gales y cuatro para los British & Irish Lions).
Es, además, el quinto Wallaby en llegar a los 100 tests. Se unió a David Campese, George Gregan, Stephan Larkham y George Smith.