Antonio Álvarez busca apoyo, el capitán Blanco tuvo un gran partido

Frío muy frío, como nos estamos acostumbrando en Mendoza. Poca gente en las instalaciones de Liceo pero muchos de los presentes muy entusiastas dispuestos a ver lo mejor de sus equipos.

Así, con el abrigo a cuestas y el café como protagonista, los dos equipos se presentaron en cancha con el objetivo principal de calentar la tarde en Carrodilla.

Las acciones comezaron favorables al dueño de casa que rápidamente puso los primeros tres puntos en el score por intermedio de su apertura. Poco después, llegaría el turno del juvenil centro de Mendoza quién por la misma vía puso la igualdad en el partido.

Los equipos recién se estaban conociendo y Liceo era el que se daba el gusto de marcar una leve diferencia dominando y generando juego principalmente desde la hilera.

Sin embargo, cuando pocos lo esperaban, una line-out bien ejecutado por el conjunto visitante permitió que el pilar Leandro Pereyra se cortara y marchara al frente con su potencia característica donde se encontró con la defensa pero, previamente, alcanzó a ceder para la entrada del segunda línea José Ramírez que fue el encargado de marcar el primer tyr del encuentro.

Dudas respecto a la conquista debido a vacilaciones del juez del partido por algunas quejas de los hombres liceítas pero finalmente se paró frente a la guinda Viazzo metió la conversión y disipó los cuestionamientos.

Mendoza era el dueño del partido y Liceo tenía que ir a buscarlo y así lo hizo generando las jugadas necesarias para revertir el score aunque su pateador no anduvo derecho y dejó pasar dos oportunidades de palos (una de ellas bastante factible).

Más allá de la falla en la puntería los dirigidos por la dupla Meli-Leyes no se quedaron en lamentos y tras un scrum cinco en donde se levantó Barni para arremeter y una posterior sucesión de fases permitieron que nuevamente el octavo apareciera como protagonista para conectarse con el capitán Gustavo Gil que entraba en potencia para marcar la merecida conquista de su equipo.

Con ese try los "Clavos" pasaron a ganar el partido pero todavía quedaba tiempo. Mendoza no se desesperó, supo pedir palos cuando tuvo que hacerlo y de esa manera terminó con el score a su favor en los primeros cuarenta minutos de juego.

Ya en el complemento, en el conjunto "Blanco" los fowards cumplieron un papel determinante para asegurar la posesión y a partir de eso buscar el dominio en el juego.

En el scrum los gordos del Mendoza marcaron una diferencia importante a la que se le sumó (ya en la segunda parte) un mejor juego desde la hilera en donde incluso llegó a robar dos pelotas.

De esta manera, Liceo comenzó a perder la iniciativa, se lo pudo ver más contenido y no logró gravitar pese a algunos destellos de algún forward o back de su equipo.

Asimismo, hay que resaltar, que el local comenzó el segundo tiempo con uno menos y cuando recuperó a ese hombre sobre el final del encuentro perdió a otro por ver la cartulina amarilla.

Por su parte, los dirigidos por el trío Treglia, Garignani, Montilla, no hicieron maravillas pero supieron leer el partido y fueron eficaces a la hora de sumar puntos lo que en definitiva les permitió mantener una ventaja en el tanteador pero que siempre fue exigua.

Y así, con un dueño de casa que no se quería dar por vencido, sobre el pitazo final llegó una jugada del "Colo" Ramos que por una de las puntas y soportando el tackle de un adversario, logró ceder para que el wing Gouyet volando marcara el último try del partido.

La conversión era muy dificil, el "Cufa" Canet no pudo y así Mendoza logró quedarse con los puntos en un una victoria muy festejada por toda la gente visitante.