Llega diciembre y arranca el tiempo de balances para aquellos que no están dentro del andamiaje europeo. Uno de ellos, por caso, es Matías Díaz. Este pilar derecho mendocino que vivió un meteórico ascenso desde comienzos de año.

Concentraciones con M20. Mundial Juvenil. Pensacola. Rugby Championship. Firma con Highlanders. America's Rugby Championship. Ventana de noviembre. Barbarians. Las escalas que todo jugador sueña con vivir en algún momento de su carrera, Díaz las tachó con tan sólo 20 años en este 2013.

Barbarians, su último y uno de los más destacados honores, fue una sorpresa total y absoluta. "Me enteré en el aeropuerto cuando estaba por viajar a Canadá con los Jaguares. Estaba al lado de unos compañeros y me dijeron que no diga nada hasta que no se confirme. ¡Así que fue muy raro! Tuve que guardarme la alegría (risas)", dijo a minutos de emprender el vuelo a Argentina nuevamente.

Díaz fue titular en el encuentro que los Baa-Baas disputaron ante Fiji el último sábado en la Catedral del rugby en Twickenham. Más de sesenta minutos de acción y un anecdótico triunfo 43-19 conformaron sólo parte del sueño. Esta edición del combinado por invitación contó con la presencia de más argentinos, y amigos.

Guillermo Roán, Manuel Carizza, Martín Landajo y Santiago Cordero también supieron decir presente. "Internamente me generó mucha alegría, es algo muy bueno que te tengan en cuenta y más en este tipo de eventos especiales. Tanto amigos como familia estaban tan o más emocionados que yo", contó.

-Ya conocías Twickenham por estar con Los Pumas, ¿qué ambiente hubo el sábado en Barbarians?
-Lo conocía pero desde afuera de la cancha ya que no tuve la suerte de jugar con Los Pumas frente a Inglaterra. Igualmente tuve la revancha con Barbarians, el clima fue algo fantástico, una verdadera fiesta.

-¿Cómo viviste compartir cancha con jugadores de la talla de Tendai Mtawarira y Shalk Burger?
-Lo viví de forma intensa. Obviamente no hay mucho que decir, creo que se vio que son unos jugadores con una calidad técnica y física realmente impresionantes.

-¿Cumpliste todo lo que te habías propuesto en este 2013? ¿A qué apuntás al año que viene?
-Lo cumplí y lo superé por mucho (risas). A principios de año apuntaba a tener un buen Mundial Juvenil para poder quedarme en el sistema. Se vino todo muy de golpe: Pensacola, Rugby Championship, Barbarians y ahora Highlanders. Mi objetivo será exprimir al máximo mi experiencia en Nueva Zelanda, tratar de crecer ya que soy joven y meterme en el máximo nivel que es jugar en Los Pumas.