Agustín Pichot

Allí está Agustín Pichot. El ex capitán de una selección argentina que sentó las bases para un equipo que hoy pelea mano a mano con los mejores del mundo. Ya alejado de las canchas desde hace tiempo, en su nuevo rol de empresario e integrante del Consejo Directivo de la UAR, Pichot se siente cómodo.

"Dale, pregunten", dice antes de comenzar y no esquiva ningun tema: el escándalo de la UAR, su rol adentro de ella, el rugby, los Pumas y los amigos que le dejó su paso por el deporte. Rodeado de viejos recuerdos y nuevos emprendimientos, el ex medio-scrum de los Pumas se define como "alguien simple que logró algo extraordinario", así al menos lo cuenta en su libro, "El juego manda".  

"Si los chicos juegan como los partidos pasados, pueden ganar tranquilamente. Antes de empezar el torneo, dije que lo más probable era ganar de local, y uno de los dos últimos", señaló sobre los próximos encuentros de los Pumas en el Rugby Championship, ese sueño que tuvo como jugador, el de enfrentarse constantemente a los mejores del mundo. 

-¿Que pensás de los partidos que quedan contra los All Blacks y Australia?  

-Es tremendo. Todos creen que vamos a ganar y hay que tener cuidado. Es el error que cometemos enseguida. Hace un mes era imposible y ahora para todos tienen que ganar. Si juegan como lo están haciendo, van a tener muchas chances, pero enfrente están dos de los mejores del mundo. 

-¿A veces no te dan ganas de decir "basta de la derrota digna"?  

-Sí. Pero los chicos en el ADN lo tienen. Se vio la bronca cuando empataron contra Sudáfrica o perdieron el otro día con Australia, ellos son los que más quieren ganar y no se conforman, van un poco más allá. 

-¿No sentís, pensando en los resultados, que hay una "futbolización" del rugby?  

-No, los argentinos somos así. Los Pumas siguen transmitiendo algo que está buenísimo, que es, siendo inferiores, dejar todo. En el fútbol tenemos la concepción de que somos los mejores y entonces el enunciado y lo que se exige es diferente. En el rugby sabemos que no somos los mejores, por ahí en diez años puede pasar, hoy no. 

-Hablemos de lo que pasó en la UAR...  

-No me mezclen con el fraude de la UAR. 

-¿El problema saltó por un control de la UAR o de afuera?  

-Es lo de menos. Me están poniendo el punto en si nos dimos cuenta que nos afanaron en el momento, o no. 

-Pero es importante saber si había controles, o no.  

-Había controles, pero fallaron. Nos equivocamos. Aunque no era dirigente, me hago cargo porque era parte de la UAR, pero son cosas que hay que corregir. Algunos dijeron que queríamos tapar el problema...¡lo sacamos en el medio del Rugby Championship y lo podríamos haber guardado unas semanas más! Creímos éticamente que teníamos que informarlo. Hablé con la IRB, con la Sanzar y dejamos todo OK. 

-¿Són sólo los dos nombres (Andrés Sánchez y Hernán Blanco) que figuraron desde el principio o hay más involucrados?  

-Es algo que no puedo contestar porque hay una investigación. Igual me sorprendió que hayan saltado tan rápido los nombres, imaginate la cantidad de pruebas que hay. Yo ya había aconsejado cambiar a esas personas, trabajaban desde el '99 en la UAR. 

-¿Se puede ser parte de la UAR y a la vez estar en las empresas con las que hacen negocios?  

-Te la doy vuelta. ¿No sería injusto que yo venga con contratos de Nike o Peugeot buenísimos y no se hagan? Hace 10 años que me dedico a ésto, la UAR factura el doble, ¿no es injusto que se me acuse? Si yo hubiese hecho algo contra la UAR, fusilame en un paredón. Me podría haber quedado en mi casa como consultor y cobrar porcentajes de todos los negocios que le acerqué a la UAR, y es un montón de plata. No hay una boleta que diga que Pichot se llevó ésto o lo otro, y mirá que la buscan. 

-¿Pero no hay un conflicto de intereses a la hora de negociar los contratos?  

-Ahí está el problema. Yo no negocio contratos, los llevo, los convenzo porque creo en el proyecto. No me siento a negociar, ahí sí habría un conflicto de intereses. Yo le digo a la UAR que tengo contactos con estas empresas y no me meto más. 

-¿Por qué pensás que se te nombra como la cabeza de la UAR cuando no lo sos?  

-Porque la Argentina es muy personalista. Hay que idolatrar o congraciarnos con una persona, o putearlo. Está siempre ese antagonismo. Hay que tener a alguien para eso y ahí estoy yo. 

-¿No te parece que vos también tenés un manejo personalista?  

- Estar en la primera línea de fuego es difícil. Hay gente que le gusta liderar, otra ir atrás. No me molesta ir adelante porque ahí se generan los cambios. Hay que tener la sensibilidad para consensuar las decisiones, pero tiene que haber cabezas. No hay que demonizarlas ni magnificarlas. Igual, yo me siento bien en la pelea. Trato de convencer con argumentos. En el país estamos todo el tiempo atentando contra nuestro propio éxito. 

-Te traemos de vuelta al rugby. ¿Sentís que con este Rugby Championship vuelve de a poco la "Pumamanía" como pasó después de 2007?  

-Ojalá. Eso significa más chicos jugando al rugby, que es el objetivo que debe tener la UAR, sumar más jugadores. 

-¿Vés en este equipo muchas cosas mejores que en 2007?  

-Sí, es una evolución. El ADN de 2007 es el mismo por varios jugadores que estuvieron ahí y que están acá. Es un equipo que le falta madurar en el cierre de los partidos, pero están jugando por encima de la media. A mí me emocionan, me entusiasman mucho. Me sorprende porque sabía que íbamos a estar bien, pero no tan bien. 

-¿Si te decían antes de que arrancara el Rugby Championship que iban a tener estos partidos, lo imaginabas?  

-No. Tampoco era de los que pensaba 'nos comemos 50 puntos', pero te admito que no estaba en el plan inicial. 

-¿Con este torneo, se suplió la falta de partidos para los Pumas de la que tanto se quejaron?  

-La verdad que sí. Es increíble la cantidad que hay este año. Así nos podemos perfeccionar todo el tiempo, la clave es desafiarte contra los mejores, la excelencia viene así. 

-Hace un año hablabas de que comenzaba un período de transición, ¿en dónde estamos hoy?  

-Terminando la adaptación a este torneo, es el final de la primera parte. Ahora falta la franquicia para el fin de ciclo o la inserción de la mayoría de los jugadores de Europa en el hemisferio sur. 

-¿Ves rugby?  

-Veo todo 

-¿La URBA?  

-Sí 

-¿Qué te parece?  

-Hay que hacer un campeonato diferente, con distintos torneos. La primera parte del año debe ser clasificación, tiene que haber un campeonato nacional mucho más grande. El tema es ser organizados, se puede. 

-¿Te gustaría tratar de cambiarlo?  

-Sí, claro. Estamos en eso y esperamos que el año que viene se pueda.