Parte de la M19 de Peuma en el gimnasio
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Faltando muy poco para el cierre del vernáculo Top 9 Cuyano 2010, RugbydeCuyo te acerca un pantallazo de lo que está sucediendo en juveniles, precisamente en una categoría que representa uno de los últimos peldaños para pasar a formar parte del plantel superior.
El presente de un torneo tan competitivo y parejo ameritaba una charla con sus protagonistas, por esta razón, parte del plantel juvenil de Peumayén RC accedió a una rica charla que nos dejó bastante para contar.
A continuación les brindamos los conceptos vertidos por jugadores y unos de sus técnicos.
Formato del Torneo, presente y expectativas.
Consultados sobre lo vivido a lo largo del año y la proximidad del desenlace de la categoría, los chicos consultados coincidieron en, humildemente, ser cautos y realistas razón por la cual Octavio Salvalaggio (Capitán y octavo del equipo) manifestaba: “el campeonato ha sido y es muy duro, eso se refleja en el hecho de que faltando pocas fechas todavía hay varios equipos con posibilidades de ser campeón”.
Mientras que, por su parte, Agustín Carmona (Subcapitán y ala) agregó: “somos pocos los equipos que jugamos en este campeonato y eso está bueno porque cada partido es muy importante. El nivel entre los equipos es muy similar y hay jugadores muy buenos, no hay un partido para relajarse. Actualmente nos están quedando dos partidos de visitante (el próximo frente a Marista, el último con Mendoza) y uno de local (contra Tequé). El campeonato está abierto para varios equipos porque hay poca diferencia de puntos entre los que lideran”.
Roto el hielo con las palabras de los jugadores fue el momento de que uno de los técnicos aportara su visión de la competencia y de sus dirigidos. Así, Federico Messina, quién además es el preparador físico de las juveniles del club, nos comentó: “me ha gustado el formato del torneo aunque a su vez es cierto que se ha tornado corto y creo que es por el hecho de que en el país no hay muchos equipos que jueguen con una M19 debido a que cuesta bastante formar una división de chicos a esta edad cuando muchos se encuentran terminando la secundaria o por comenzar la universidad”.
Posteriormente, Messina se explayó respecto a su grupo de trabajo y su relación con sus players. Al respecto nos decía: “a mi me ofrecieron la división y yo propuse que me ayudara Mauricio Olivares porque ya habíamos trabajado juntos y tengo una amistad con él. Después, por suerte, se sumó el “Bichi” Luis Capelli para aportar su experiencia encargándose de los trescuartos”.
“En lo personal es el segundo año que tengo a los chicos y la verdad es algo que me encanta porque se crea un vínculo importantísimo. He notado un crecimiento significativo en cada uno de ellos en cuanto al juego pero principalmente en el aspecto humano y eso para mí es fundamental”.
“Nuestro objetivo siempre ha sido mejorar el juego partido a partido y formar una base de jugadores que después podrán estar en la primera y ayudarle al club. Cuando arrancamos se buscaba mejorar la actuación del año pasado en donde este mismo equipo quedó en un tercer lugar además de crecer, lógicamente, a nivel equipo haciendo lo mejor que se pueda. Las cosas han marchado por buen camino y hoy no sería un fracaso salir en una posición u otra”.
“Tener a jugadores como Dalmaso o Salvalaggio para uno como entrenador y parte del club es un orgullo pero también es importante para el resto de los chicos porque para ellos son un ejemplo a seguir y el reflejo de lo que es la responsabilidad, el laburo y el meterle cada día más. Me parece que la experiencia y el conocimiento de ellos le suma mucho al grupo y hasta a nosotros nos ayuda el charlar con ellos para saber como están trabajando y que están haciendo”.
Plan de juego, exigencias, compromiso
El encargado de transmitir lo que buscan hacer los “Toros” una vez que entran a la cancha fue el Marcos Debandi (medioscrum) comentando que: ”nuestro juego se ha basado en la obtención desde las fijas, tanto scrum como line-out y en base a eso hemos tratado de jugar con los trescuartos. Creo que tenemos una buena primera línea que ha estado siempre cumpliendo de manera regular y eso ayuda bastante sumado al resto del pack de fowards que, por suerte, no desentona.
También es importante resaltar que afuera tenemos un jugador como el “Rafa” que juega de centro, es muy potente y es uno de los que marca la diferencia en la categoría.
Sin quererlo pero por cosas de la conversación fue necesaria la intervención del sereno Rafael Dalmaso (centro) para, básicamente, opinar de su persona y de lo que él representa dentro del grupo y nos dijo: “a veces he sentido una responsabilidad grande por el hecho de no querer faltar y tratar de cumplir con mis amigos pero igual las veces que me tocó no estar junto con el “Oti” el equipo también supo responder y sacó fuerzas de otro lado. Todos podemos jugar y por eso la frase que tenemos es de que nadie es indispensable en el equipo, con eso sabemos que cualquiera puede estar y eso nos ayuda a unirnos más como grupo”.
Con referencia a los aspectos técnicos y tecnológicos que cada día se acercan más al rugby y a edades más tempranas los chicos se manifestaron a favor de la utilización por ejemplo del análisis de video y expresaron: “hemos visto algunos partidos que fueron filmados pero no es algo que hacemos siempre. Cuando lo hicimos no buscamos las fallas del rival porque nosotros ya tenemos nuestro plan de juego pero sí sirve mucho para verse buscando después corregir y mejorar como jugador”.
Flash de historia, amistad y familia.
Tratando de que nosotros entendamos como se formó ésta división que lucha por quedarse con el torneo, el capitán Salvalaggio recordó “nosotros empezamos en enero con una base de doce jugadores (parte del grupo que viene jugando desde infantiles juntos) a partir de ahí le empezamos a meter mucho para lograr ser quince jugadores y poder empezar a pensar en una buena pretemporada, haciendo amistosos o lo que se pudiera. Después con el correr del tiempo y principalmente de los partidos, fuimos sumando gente y hoy llegamos a ser 25 jugadores los cuales tratamos de entrenarnos y hacer lo mejor posible por el grupo y por eso desde el comienzo nos planteamos cambiar lo que nos sucedió el año pasado. En ese torneo nos rompimos bastante en la primera ronda y después con el tema del receso cuando retomamos nos olvidamos de los partidos que habíamos hecho y nos vinimos abajo. Ahora pensamos partido a partido y el principal objetivo es consolidar a la división, al grupo y sumar experiencia sin pensar tanto en el campeonato”.
El toque de humor de la charla lo puso el curtido Martín Da Peña (hooker) que se refirió a su labor y se acordó de sus compañeros: “siempre he jugado de hoocker, creo que no tengo otro puesto, es donde me gusta jugar y donde me divierto. Si bien ahora no estamos todos, con seguridad que el más bando es Lucas Reyes, que es de esos tipos que llega a jugar sin que uno sepa donde ha estado o que ha hecho”.
“Creo que compartir cosas junto al grupo y ser amigos suma. Nosotros sabemos salir juntos a bailar o, por ejemplo, como lo hemos hecho muchas veces, nos juntamos en el quincho del “Topo” o donde sea para hablar del partido y festejar si hemos ganado o pensar que hicimos mal si nos tocó perder”.
Finalmente, todos los consultados se encargaron de resaltar el trabajo que hacen sus padres y el acompañamiento que reciben de sus familias, distinguieron la dedicación de cinco padres que cumplen la función de managers (Sergio Dalmaso, Ruben Marsala, Juan Versich, Daniel Oyola y Omar Chavero) que se han encargado de que a la división no le falte nada, ocupándose de todas las cosas extra al rugby (tercer tiempo, materiales, indumentaria, hidratación, planillas, tarjetas, etc).
De esta manera, jugadores junto a cuerpo técnico se encuentran enfocados y concentrados en entrenar y mejorar en los aspectos que se ven dentro del campo de juego puesto que afuera del terreno se encuentran muy apoyados.