Córdoba está sólido de cara al Argentino

Fue un claro 30-11 (4-0) en las Cuatro Hectáreas de Fisherton, imponiendo con autoridad el juego más conveniente a sus intereses, ante un Rosario por momentos impotente.

Para los rosarinos solo queda en el balance positivo, el buen arranque. Pelotas rápidas, juego desplegado y cuando muchos se estaban acomodando Juan Imhoff -quebrando por la punta- ya había aterrizado en el ingoal cordobés. Hasta allí parecía que Rosario quería ser protagonista.

Pero está claro que querer, no siempre es ser. Desde ese momento el que comenzó a manejar los hilos del partido fue Córdoba. Se impuso con claridad en el scrum, fue vehemente en la lucha por la pelota, manejó bien el contraruck y hasta se dio el gusto complicar a Rosario en el line, que en teoría iba a ser la mejor fuente de obtención.

Con sus forwards para adelante, el pie de Ramiro Pez fue una estilográfica que puso el juego donde más convenía. Se podría decir que fue el titiritero de la tarde, manejando casi a su antojo el partido, favorecido por Otero y Bruno quienes se encargaron de dominar en la base.

Rosario de a poco fue cada vez más un símbolo de impotencia. Presionado en todos los sectores, tanto por el lado de los delanteros, como en el centro de la cancha donde evidentemente Córdoba espera la estocada. Sin la pelota, con problemas en el primer tackle, condenado a correr de atrás a los atacantes cordobeses, solo expuso mucha actitud, garra y corazón. Pero eso no es suficiente para ganar, se necesita tener la pelota y ésta fue patrimonio de la visita.

El complemento siguió mostrando más de lo mismo. De a poco el local fue inclinando la cancha a su favor. Con mucho fervor, pero pocas ideas, tuvo dominio del campo, pero siguió teniendo problemas de posesión; siempre bajo presión, siguió cometiendo errores y los pocos metros ganados se terminaban perdiendo enseguida. Si bien no tuvo pelotas claras para jugar, dejó también la sensación que tampoco se animó mucho, no arriesgó.

Córdoba se abroqueló en defensa. Le puso cerrojo a todo el ancho de la cancha, especialmente cuando quisieron quebrarla cerca de las formaciones, donde recuperó más de una pelota. Controló bien la pelota, puso orden con el maul. Defensivamente se repuso bien, favorecida por la lentitud de los movimientos rosarinos. Y de contragolpe se encargó de inquietar el ingoal local. Tras un par de movimientos fallidos, que podrían haber definido el marcador mucho antes, hubo que esperar casi el final para ver la diferencia que marca claramente lo hecho por uno y otro.

Rosario amagó. Y después fue casi un espectador más. Córdoba, superado el sofocón inicial, tuvo la iniciativa siempre, impuso su juego y con sus forwards puso al desnudo los problemas ya crónicos de un rugby que sufre cada vez que "sale" al Interior. A su paso por Rosario, "El Dogo" dejó en claro que tiene equipo para seguir haciendo historia.

Cancha: Jockey Club Rosario, barrio Fisherton
Arbitro: Fernando Martorell (Tucumán)
Arbitros asistentes: Sergio Tizón y Juan Sylvestre (ambos Rosario)

Rosario: G.Randisi, F.Manavella (N.Chesta/F.Manavella) y J.Negrotto (E.Giacoponi); P.Bouza (cap) y L.González (J.Taborda); G.Dellavedova (F.Masucco), S.Boffelli y M.Baravalle; P.Escalante y T.Carrió; S.Cáccamo, F.Amelong (N.Gatarello), A.Fradua y J.Imhoff; P.Iguri (M.Escalante).
Entrenadores: Ricardo Imhoff - Gustavo Minoldo

Córdoba: R.María (cap), F.Fortuna y G.Cortéz (A.Menta); M.Lobatto (A.Panceyra) y H.Schierano (A.Allub); F.Panessi, J.Basile y R.Bruno; M.Otero (M.Maineri) y R.Pez; L.Gómez López, A.Simó, F.Boaglio y F.Barrea (S.Tobal); G.Revol (M.González).
Entrenadores: Damián Rotondo - Agustín Rodríguez Araya - Daniel Tobal.

Primer tiempo:
7´ try Imhoff 5-0
13´ penal Pez 5-3
18´ try Barrea, gol Pez 5-10
24´ penal Carrió 8-10
26´ drop Pez 8-13
30´ try Bruno, gol Pez 8-20
Segundo tiempo:
25´ penal M.Escalante 11-20
29´ amarilla A.Menta (UCR)
37´ try Mainardi, gol Pez 11-27
43´ drop Pez 11-30.