El primero fue de los Boks, se viene el segundo test match

Tras la victoria de los campeones del mundo en Durban en el primer envite, Pretoria acoge este sábado el segundo duelo con un reto, dejar sentenciada la serie, y una novedad: el regreso de Schalk Burger a la tercera línea de los 'Springboks'.

El reto tiene doble sentido, pues un nuevo triunfo no sólo conseguiría dejar la serie en suelo surafricano, sino que además vengaría así la afrenta de hace doce años, cuando los Lions se impusieron, curiosamente también con McGeechan como técnico, en dos de los tres partidos. Fue su última gira en Suráfrica en 1997.

La novedad es la vuelta de Burger, que no pudo disputar el primer partido por una lesión, y que supone el único cambio en el quince titular de Peter de Villiers y además provoca que su relevo en dicho partido, Heinrich Brussow, vuelva al banquillo a pesar de haber anotado un ensayo en el primer 'test match'. Junto a él estará el talonador debutante Chiliboy Ralepelle, mientras que tanto el pilier Gurthro Steenkamp como el medio melé Ricky Januarie, que jugaron algunos minutos en Durban, se han quedado fuera.

Y es que el seleccionador de Suráfrica ha formado un banquillo con cinco delanteros y sólo dos jugadores de la línea: el apertura Morne Steyn y el centro Jaque Fourie. Así, sería el apertura titular Ruan Pienaar quien cubriese el puesto de '9' en caso de necesidad.

En cuanto a los Lions británicos, el técnico Ian McGeechan realizará hasta cinco cambios respecto al equipo que perdió el pasado sábado en Durban en el primer 'test match'.

Sudáfrica: Francis Steyn; Pietersen, Jacobs, J. de Villiers, Habana; Pienaar (ap.), F. du Preez (m.m.); J. Smith, Spies, Burger; Matfield, Botha; Smit (cap.), B. du Plessis y Mtawarira.

Suplentes: Ralepelle, Carstens, Bekker, D. Rossouw, Brussow, Fourie y Morne Steyn.