En un partido cambiante y emotivo, Los Azules lograron una gran victoria en su casa al derrotar a Los Tordos 32 a 17 (4-0), de esta forma forzaron un nuevo partido dentro de 7 días en el Carril Urquiza.

El score se abrió temprano con un penal de la figura de la cancha, Gerardo Zelada, quién al final del match sumaría 17 puntos para su equipo.

Tordos jugaba con 14 por la amonestación temprana de Perea. El equipo de Kretschmar se veía con actitud ganadora, y así se fue encima de Tordos y lo asfixió en todos lados, un try de Juan Pablo Ruiz (más tarde expulsado por un cabezazo) y otro penal del "Kira" Zelada ponían al "Teke" 11 a 0 arriba a diez minutos del final de esta primera etapa.

Llegaría la lesión de Pablo Carballo, después de tacklear entre dos a Alejandro Bär en un ataque que podría haber terminado en try, el medio scrum no se levantó del suelo y fue reemplazado por Dalesandro (de buena labor).

Este fue el momento en el que los Azulgranas tomaron el control del juego y tras un arranque imparable de Juan Ongay, que con rivales encima no paró hasta caer dentro del ingoal.

Se iban los primeros cuarenta y Tordos perdía 11 a 7, en parte por los envíos afuera de Javier Genoud (erró tres penales en esta parte).

Arrancaba el segundo tiempo y Zelada seguía estirando ventajas con su pie derecho.

Tordos logró equilibrar su ataque, jugadas individuales arrancando en potencia de Bär y "Naza" El Hom, más Lértora buscando espacios siempre con el pie, fueron llevando a Los Pájaros al campo de su rival.

En dos minutos un try de Raholín y otro de Gonzalo Salcedo le daban a los muchachos de Pontis-Orrico aire y la ventaja en el marcador 14 a 12.

Las amarillas estaban a la orden del día, Teqüe metía varios cambios, los ánimos desde la tribuna se empezaban a caldear y la presión tomaba un rol importante en los dos equipos.

Los 12 minutos finales fueron electrizantes, Tordos tenía la pelota pero se equivocaba, impresiciones en las manos o movimientos de más hacían que el dueño de casa tomará posesión y armara un nuevo ataque, así llegó el try de José Cannata y dos penales más de Zelada para cerrar el partido.

El broche llegó en tiempo cumplido, fue el try de Cannata, Gabriel corrió desbordando después de tomar la guinda en una corrida de línea azul para volar a la punta y apoyar su conquista.

Alegría para los General Ortega, preocupación para los de Carril Urquiza, lo cierto es que para el segundo partido, ambos conjuntos deberán hacer magia para cubrir lesionados, amonestados y expulsados.